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Si te preocupa el estado de tu piel e incluso de tus huesos, debes saber que un gran aliado para cuidarlos es el colágeno. Este, que se produce naturalmente en nuestro cuerpo, también se puede encontrar como suplemento. Y es que, cuando se llega a cierta edad, la producción de ese disminuye y, por tanto, se requiere aportarlo al organismo de manera complementaria.
En este artículo, vamos a intentar ayudarte a que puedas dar con el mejor colágeno para piel y articulaciones en forma de suplemento. Toma nota porque la información que te vamos a indicar es la que te será crucial para elegir qué colágeno comprar.
El mejor colágeno es el de Be Levels:
collagen
¿Qué es el colágeno y qué tipos existen?
Para tener claros los conceptos, es necesario determinar que el colágeno es una proteína que fabrica nuestro cuerpo y que ejerce una función realmente importante. Exactamente, se encarga de mantener las estructuras de tejidos que tenemos en aquel, tales como articulaciones, huesos, músculos, dientes, piel, vasos sanguíneos...
Además, no podemos pasar por alto tampoco que aporta hidratación, que retrasa la flacidez de la piel e incluso que combate el envejecimiento.
Un total de veinte tipos de colágeno diferentes son los que existen, aunque hay varios que tienen especial importancia o que son los más conocidos. Este sería el caso, por ejemplo, del tipo I, que está presente en la piel y que es el más numeroso. En su caso, es importante porque aporta elasticidad a la vez que resistencia.
El tipo II, que es el que se hace presente en cartílagos y en articulaciones, también es uno de los más significativos. Su labor, en concreto, es la de lubricar tejidos y recubrir las citadas articulaciones, por ejemplo.
Asimismo, también adquieren relevancia el tipo III, que se encuentra en los vasos sanguíneos, en los intestinos y en los músculos, y el tipo IV, que, además de en los vasos, se halla en el ojo y en los capilares.
Las diferentes fuentes de colágeno
Como hemos indicado, a partir de los 30 años, la producción natural de colágeno empieza a disminuir. De ahí que en este caso haya que optar por tomar un suplemento de dicha proteína. Aunque también es una buena opción para quienes han sufrido alguna lesión, para quienes padecen obesidad e incluso para quienes practican habitualmente deporte.
Cualquiera de esas personas es importante que sepa que en el mercado hay diferentes clases de colágeno en función de su origen, además de muchos alimentos ricos en colágeno que se pueden tomar.
Así, existen las siguientes clases de colágeno:
El colágeno de pollo
Este es de tipo II y se obtiene a partir de la piel y de los huesos del mencionado animal. No está entre los más recomendados porque puede contener contaminantes y porque los pollos, en muchos casos, se crían en granjas masificadas donde no se cuida especialmente su alimentación.
El colágeno marino
Es de tipo I y se saca de las espinas y de la piel del pescado. Tiene a su favor que es sostenible y que aporta unas buenas dosis de colágeno. Además, cuenta con una notable riqueza en cuanto a aminoácidos se refiere.
El colágeno de huevo
Como su propio nombre indica, se obtiene del huevo, concretamente de la yema y de la cáscara. Fundamentalmente, es de tipo I, aunque puede incluir del tipo III y del IV, entre otros.
En este caso, es interesante saber que tiene la misma desventaja que la indicada para el colágeno de pollo. De ahí que no sea la opción preferida.
El colágeno porcino o bovino
Por último, se encuentra este otro colágeno, que suele ser del tipo I y del tipo III. Se obtiene de los desechos de vacas y de cerdos, tales como cartílagos, huesos y piel. Aunque es una buena opción, tiene en contra que no es el más presente en el mercado, pues algunos de esos desechos se utilizan para fabricar una gran variedad de productos.
¿Cómo elegir el mejor colágeno para piel y articulaciones?
Una vez que ya te hemos desvelado detalles importantes sobre el colágeno, llega el momento de descubrir cómo seleccionar el mejor colágeno hidrolizado del mercado. Pues bien, hay que decantarse por uno teniendo en cuenta estas consideraciones:
- Si lo que más te preocupa es tu piel, debes decantarte por uno del tipo I. Asimismo, debes saber que el colágeno de origen marino, tras varios estudios, se ha determinado que es el más recomendable para cuidar la piel y los huesos.
- En el caso de que te interese proteger y velar por tus articulaciones, tienes que optar por uno del tipo II nativo. El motivo es que ese las fortalecerá, las protegerá de los impactos y, además, se encargará de que el cartílago se vaya degradando de forma mucho más lenta.
- Asimismo, es muy importante que a la hora de elegir un suplemento de colágeno te decantes por uno que esté sea hidrolizado ¿Por qué? Porque su absorción es mucho mejor.
- Ni que decir tiene que debes seleccionar uno que cuya calidad y seguridad estén certificadas, como nuestro colágeno de Be Levels.